DESFASADOS II
Te hablé en la columna anterior de la injusticia que significa vivir desfasados en el tiempo, y cómo determinadas habilidades y oficios ascienden en prestigio y otros se deslizan pendiente abajo hasta, en algunos casos, caer definitivamente. No te hablo de la prehistoria, apenas unas décadas atrás, en mi pueblo había un lechero, don Lagos, que recorría todas las mañanas mi barrio con su carrito verde y su caballo blanco. En los costados del carro iban los tachos de aluminio y con una jarra medidora te daba el litro de leche en el recipiente que vos llevabas. Sé que por la velocidad de la vida actual don Lago parece hoy un vendedor del cabildo de Mayo, de esos que representábamos en los actos escolares. Y sin embargo hay otro tipo de vendedor que se parece bastante y tiene presencia hoy, el repartidor de bidones de agua. ¿quién nos iba a decir hace décadas que este oficio iba a ser tan numeroso en la actualidad? El Rolo Santamarina fue herrero, del gremio de Hefesto, de los de fra